Agradecidos, emocionados y con ilusión agradecemos a Alfonso y la gerencia del centro, por hacerlo posible. Y por supuesto a todos, sin excepción, por venir.
Todos ellos han tenido la suerte de encontrar tres familias responsables, tres hogares, han empezado una nueva vida. Nosotros continuaremos en la lucha, tratando de encontrar hogares para muchos otros que también se lo merecen, pero todavía no han tenido la oportunidad de disfrutarlo.
Se fue tranquila, rodeada de amor, de cariño, en paz. Allá donde esté, estará brincando seguro, buscando a ese compi que le de juego y con el que poder hacer alguna cabriola.