No sería de recibo dejar de hacer un artículo dedicado a este oso amoroso, de gran corazón y un poco cabezota, al que sus ángeles bautizaron con el nombre de Sombra.
Sombra es un perro mestizo que llevaba más de 5 años abandonado a su suerte en el muelle de Santa Cruz. Si bien no le falta comida, agua, cariños y su desparasitación de vez en cuando, esa no era vida para este peludo.
A la intemperie, en una zona de mucho tráfico, peligros acechándolo…..
Una seguidora, Lisbeth Morales, se hizo eco de su historia y pronto, entre todos, nos pusimos manos a la obra. Tratar de cambiar su vida era nuestro objetivo y así procuramos hacerlo.
Sus ángeles, cuidadoras, las personas que durante todos estos años velaron por él lo trasladaron al veterinario en donde se le hicieron diversas pruebas para valorar su estado. Allí pudimos saber que estaba libre de filaria, que los valores de la bioquímica y hemograma eran correctos, le pusimos chip para que estuviera debidamente identificado y se le hicieron varias radiografías que nos informaban de un problema neuronal degenerativo.
En principio se valoró la opción de operarlo, pero el tiempo ha dicho que no es la mejor vía para que gane calidad de vida.
A pesar de ser un amor de perro, nadie parece interesarse por él. Despierta mucha simpatía y cariño, pero nadie se decide a dar un paso tan importante para él, darle un hogar.
Ahora está en una residencia, donde recibe rehabilitación y está bajo un tratamiento para que no pierda el equilibro, pues sus patas traseras le fallan y no le responden como él quisiera.
[/fusion_builder_column][fusion_builder_column type=»1_1″ background_position=»left top» background_color=»» border_size=»» border_color=»» border_style=»solid» spacing=»yes» background_image=»» background_repeat=»no-repeat» padding=»» margin_top=»0px» margin_bottom=»0px» class=»» id=»» animation_type=»» animation_speed=»0.3″ animation_direction=»left» hide_on_mobile=»no» center_content=»no» min_height=»none»]Dentro de la situación que le toca vivir, se ve feliz, está cuidado, mimado y desde S.O.S.PELUDOS nos hacemos cargo de su desparasitación, atenciones veterinarias y alimentación. Raquel, Nuria y Sandra se encargan de visitarlo a diario, pagar su residencia y atenderlo.
Desearíamos que alguien valorara la opción de creer en este peludo, de darle una nueva vida. Sabemos que no es un caso fácil, por eso su adopción va con un tratamiento especial.
Si tú eres esa persona, ese ser que quiere vivir con otro ser especial, escríbenos a adopciones@sospeludos.org y si quieres acogerlo contacta con nosotros en acogidas@sospeludos.org[/fusion_builder_column][/fusion_builder_row][/fusion_builder_container]