Noa es una de las peludas que se encontraban en la perrera de Buenavista del Norte.
Tuvimos el placer de conocerla y descubrir que detrás de su carácter tímido inicial, se escondía una perra alegre, cariñosa, juguetona y con una muy buena energía.
Jovencita y un pelín acaparadora para recibir mimos, pronto se ganó el cariño de los voluntarios.
Carmen quería adoptar y en seguida lo tuvo claro: Noa la había enamorado.
Desde hace unos días a esta peluda le ha cambiado la vida, está viviendo su segunda oportunidad en un hogar responsable y es feliz y hace feliz.
Juntos cambiamos vidas!
Implícate, no lo dudes![/fusion_builder_column][/fusion_builder_row][/fusion_builder_container]